Luchando contra la desnutrición y la pobreza en Marcos Paz
Un compromiso de vida, una misión de amor
En ONG Todo Para los Niños, creemos que nadie debe quedar atrás, que la pobreza no define a las personas y que la educación, el acompañamiento y el amor pueden cambiar destinos.
Nacimos en 1994 como la primera ONG de Marcos Paz con un solo propósito: ayudar a quienes más lo necesitan. Desde entonces, trabajamos sin descanso para combatir la desnutrición infantil, el abandono de adultos mayores y la falta de oportunidades para las mujeres embarazadas en situación de vulnerabilidad.
Detrás de esta iniciativa hay una historia personal que marcó nuestro camino. Lidia Giagnoni, enfermera profesional con más de 30 años de trabajo en hospitales públicos de CABA, fundó esta ONG desde su propia experiencia de vida. Criada en la orfandad y en la calle, con la ayuda de sus maestras y el amor de quienes no la dejaron sola, decidió que su historia debía convertirse en esperanza para otros.
Más de 30 años transformando vidas
A lo largo de estas décadas, logramos que cientos de niños y jóvenes salieran de la calle y encontraran un futuro distinto. Mujeres que parecían atrapadas en la pobreza pudieron recuperar su dignidad y encontrar un camino de crecimiento. Muchachos que estaban inmersos en la delincuencia y la adicción hoy son personas de bien.
Gracias al apoyo de comerciantes, empresas y vecinos solidarios, pudimos:
Brindar alimentos diariamente en comedores y merenderos comunitarios
Ofrecer capacitación escolar y profesional
para mejorar oportunidades laborales
Acompañar a mujeres y madres solteras
en su proceso de independencia
Crear espacios de contención y ayuda psicológica para quienes buscan salir de la adicción
Ser reconocidos por medios locales y nacionales, llevando nuestro mensaje de esperanza a todo el país
De este trabajo surgieron policías, suboficiales, enfermeras, psicólogos y docentes. Personas que pudieron cambiar su destino porque alguien les tendió la mano en el momento justo.
Nuestra historia es maravillosa
Porque demuestra que nada es imposible.
Que siempre hay una salida y que con amor, entrega y compromiso, podemos transformar la realidad.
Los invitamos a ser parte de este camino.
A dar un poco de lo que Dios nos dio: no solo en lo material, sino en gracia, compañía y generosidad.
Si alguna vez pensaste en ayudar, este es el momento.
Porque cada plato de comida servido, cada palabra de aliento y cada gesto de amor pueden marcar la diferencia en la vida de alguien.
Juntos, sigamos construyendo un futuro mejor
